El alcalde de Cáceres, Luis Salaya ha valorado la propuesta del gobierno a petición de la FEMP de utilizar los remanentes de tesorería de los Ayuntamientos asegurando que “a rasgos generales es positivo aunque no perfecto”. Ha dejado claro el regidor ante los medios de comunicación que aunque no era el punto de partida de los ayuntamientos tampoco lo era para el Ministerio “y en eso consisten precisamente los acuerdos ”.

El alcalde también ha explicado que el equipo de Gobierno tiene también “clarísimo” que se quiere aprovechar la flexibilización del techo de gasto pero no se tiene “tan claro” que se vaya a acoger a este préstamo porque haremos, “sin tintes partidistas” lo que más nos interese económicamente como Ayuntamiento.

De este modo, Salaya ha insistido en que lo bueno de esta propuesta es que “al que no le guste no tiene por qué acogerse si cree que perjudica a su ayuntamiento y no tiene que sumarse”.

“Sabemos ya que hay una parte del acuerdo de la que nos vamos a beneficiar y otras que seguimos estudiando para ver si nos acogemos o no. Por ejemplo, Cáceres tiene claro ya que sí va a pedir el crédito extraordinario para el apoyo a los servicios de transporte público de titularidad de entidades locales para dotarlos de mayor financiación para compensar el déficit extraordinarios de este año. Todo lo demás se irá viendo hasta el 15 de septiembre”, ha concluido el alcalde cacereño.

De acuerdo con el decreto, los municipios deberán ingresarle a Hacienda, de forma voluntaria, sus remanentes, en el caso de Cáceres 4 millones de euros, para que luego se les devuelva el dinero en diez años, ampliables a quince, a partir de 2022.