En una entrevista reciente para DAZN, Pep Guardiola ha hecho una declaración rotunda: “Lo siento mucho, pero Leo… para mí no habrá nadie, nadie, nadie en el mundo como el argentino”. Con esta frase contundente el técnico del Manchester City subraya la influencia y el legado irrepetible de Lionel Messi en su carrera. Este artículo no solo recoge la reflexión surgida a raíz de la aparición de Lamine Yamal, a quien Guardiola también elogiaba, sino que profundiza en el vínculo profundo entre entrenador y jugador, sus logros compartidos y el impacto duradero en la historia del fútbol.
El contexto de la frase
La frase surgió cuando Guardiola, desde Filadelfia, donde su equipo se prepara para el Mundial de Clubes, para el que es favorito de las
bet en la primera ronda, comparaba a la joven promesa culé, Lamine Yamal de 17 años, con Messi. Reconoció la madurez precoz del canterano del Barça, pero fue categórico al cerrar el debate: “Lo siento mucho pero Leo, para mí no habrá nadie, nadie, nadie en el mundo como el argentino, es imposible”.
La declaración ensalza al nuevo talento, pero sobre todo reafirma lo inigualable del rosarino en el imaginario futbolístico de Guardiola, quien ya antes había comparado a Messi con iconos de la historia deportiva, sin tapujos.
Guardiola y Messi en el Barça (2008‑2012)
La era de Guardiola en el FC Barcelona arrancó en el verano de 2008 y coincidió con el despegue definitivo de Lionel Messi. Durante ese periodo, el binomio formó parte del equipo histórico del "Pep Team":
Desde julio de 2008 a junio de 2012, Guardiola fue el artífice de un Barça que acumuló
14 títulos oficiales y que era líder indiscutible en los pronósticos de las apuestas futbol de Betfair: 3 Ligas, 2 Champions, 2 Copas del Rey, 3 Supercopas de España, 2 Supercopas de Europa y 2 Mundiales de Clubes.
En 2009, alcanzaron el legendario sextete: Liga, Copa, Champions, Supercopas (España y Europa) y Mundial de Clubes, una hazaña sin precedentes.
Messi pasó de promesa a líder eterno. Durante ese ciclo, se consolidó como goleador y generador de juego. Su contribución en Champions fue clave, con actuaciones memorables, como 53 goles y 24 asistencias en la temporada 2010‑11.
Guardiola, además, realzó el talento de Messi comparándolo con Michael Jordan y resaltando su inteligencia táctica. Solo en relación a Messi dijo: “Es el mejor. No hay otro. Siempre podré decir que le he entrenado”.
La visión del entrenador
Las palabras de Guardiola reflejan una admiración profunda y consciente. No solo destaca la calidad de Messi con el balón, sino su efecto cómo referente. Desde la primera vez que lo dirigió, supo que estaba frente a “el mejor jugador de todos los tiempos” .
Aunque Guardiola reconoce que su rol fue relevante, siempre desvió el foco hacia los jugadores. Incluso afirmó que el verdadero genio era Alexander Fleming, y que él simplemente tenía talento y suerte por haber dirigido a Messi.
La evolución del entrenador
Tras su etapa en el Barça, Guardiola continuó revolucionando estilos en el Bayern Múnich (2013‑2016) y en el Manchester City (desde 2016). Ha ganado ligas en Alemania e Inglaterra y la Champions con el City en 2023.
La admiración de Guardiola por Messi ha perdurado incluso fuera del entorno culé. En cada entrevista lo coloca por encima de cualquier potencial talento y reconoce que la relación profesional influyó en su visión del fútbol.
Por eso, cuando Guardiola declara que “no habrá nadie como Messi”, no se trata de una declaración emocional vacía, sino del reconocimiento de una química única entre entrenador y jugador. Durante cuatro años definieron una época dorada en el fútbol, ganando títulos, transformando el estilo del deporte y estableciendo un legado de excelencia.
Hoy, aunque el tiempo ha pasado y Lamine Yamal brilla con su luz propia, para Guardiola Messi sigue siendo el referente absoluto. Esa declaración definitiva: nadie, nadie, nadie podría superarlo, refleja la gratitud y la admiración de un entrenador que sabe lo que es dirigir a una leyenda.
