La estructura, diseñada por el arquitecto José María Sánchez García, ha tenido un coste de 25.954 euros, financiado por el Consorcio. Consiste en una estructura desmontable, fabricada en acero galvanizado y madera, que puede ser ampliada o modificada según las necesidades, al estar construida mediante un sistema modular, de fácil montaje y desmontaje. Cada módulo consta de una serie de elementos y apoyos regulables que se repiten y permiten su ajuste al firme, sin necesidad de cimentación.

Para garantizar el mínimo impacto visual, la superficie de todo el escenario está conformada por láminas de madera con acabado natural, protegidas por una capa protectora antideslizante. Por otra parte, la fabricación de la estructura en acero galvanizado garantiza la conservación de las estructuras arqueológicas próximas.

La estructura dispone de dos rampas de acceso que posibilitan la accesibilidad física y que arrancan de la cota de la plaza hasta la superficie del escenario. Un sistema de barandillas liviano compone el perímetro de seguridad sin interferir visualmente en la contemplación de la fachada del templo.

El Consorcio de la Ciudad Monumental de Mérida ha realizado también la limpieza estacional de las estructuras arqueológicas existentes en el entorno del Templo de Diana, para garantizar su estado óptimo tras la época de lluvia

Con esta nueva intervención, el Consorcio de la Ciudad Monumental mejora el acondicionamiento de un entorno monumental que conforma uno de los principales atractivos del circuito de visita turística, al tiempo que acoge numerosas actividades culturales a lo largo del año.