La Policía Local de Badajoz ha levantado 33 actas de denuncia por diversas infracciones en materia de establecimientos públicos y ha detenido a una persona por agredir a uno de los agentes participantes en el marco de un operativo de inspección de locales de ocio nocturno en el que también se han iniciado diez expedientes por la detección de "presuntas irregularidades en materia laboral en seis de estos locales".

   La Policía Local de la capital pacense realizó en la madrugada del pasado sábado al domingo, con motivo de la inminente celebración del Carnaval, un operativo en colaboración con la Inspección Provincial de Trabajo y Seguridad Social de Badajoz consistente en la inspección de locales de ocio nocturno y de sus empleados, en varias zonas de la ciudad.

   El Servicio de Información Local y Cometidos Especiales (Silyce) de la Policía Local de Badajoz ha llevado a cabo esta operación con el apoyo de unidades uniformadas y por dos subinspectores de Trabajo, según ha informado la policía pacense en nota de prensa.

   "Inspeccionaron un total de 13 establecimientos públicos, de los que 11 resultaron denunciados por diversas infracciones y varios ciudadanos por incumplimiento de la ley antitabaco al consumir en el interior de un establecimiento", ha señalado sobre estas inspecciones realizadas en las barriadas de Santa Marina, La Paz, Casco Antiguo, Valdepasillas y San Fernando.

   De igual modo se han levantado actas por infracciones como ejercer la actividad careciendo de licencia, permitir el acceso a menores de edad a bares especiales, carencia de extintores contra incendios, clausurar con cerrojos las puertas de emergencia previstas para la evacuación de los clientes, carecer de la cartelería establecida por la normativa vigente en materia de convivencia y ocio y ejercer la actividad con trascendencia de ruidos al exterior, así como permitir fumar en el interior del local o realizar actuaciones musicales en directo careciendo de autorización para ello.

   "Es de señalar, que parte de la Inspección vino motivada por la recepción previa de quejas y denuncias vecinales sobre el ejercicio de la actividad de los citados establecimientos", ha puntualizado el cuerpo policial, que también ha resaltado la detención de un ciudadano que "increpó a los policías por la labor desarrollada en uno de los locales de ocio, agrediendo instantes después a uno de ellos, cuando se disponía a su identificación".

   Incoados los procedimientos sancionadores por las infracciones detectadas, los establecimientos públicos sancionados se enfrentan a multas de hasta 300 euros por permitir el acceso a menores de edad a bares especiales, entre 300 y 750 euros por carecer de extintores contra incendios o entre los 1.501 y 3.000 euros por la clausura con cerrojos de las puertas de emergencia.

   Las multas oscilan entre 300 y 30.000 euros por carecer de la cartelería establecida por la normativa vigente en materia de convivencia y ocio y entre los 200 y 750 euros por ejercer la actividad con trascendencia de ruidos al exterior, entre otras, ha concluido el comunicado.